Ruta de senderismo "Salto del Cabrero"

Hoy domingo, Mari Carmen y servidor hemos tiramos "pal" monte para recorrer un sendero bastante interesante y recomendable que hay en la Sierra de Grazalema que se llama Salto del Cabrero. El sendero parte desde el puerto del Boyar de 1.109 metros, que se encuentra a unos tres kilómetros y medio de Grazalema, en la carretera que va hacia Benamahoma y El Bosque.

En los alrededores nace el río Guadalete, cerca de un merendero donde se encuentra una señal que indica el comienzo. Al principio, después de franquear una verja que da incio al sendero, empezamos por un carril forestal que discurre por la falda noreste de la Sierra del Endrinal, que nos quedaba a la izquierda, y con vistas de la depresión del Boyar, que nos quedaba a la derecha.




El sendero en sí, está bien señalizado, con flechas de color verde pintadas sobre las piedras calizas, así como por el paso de las anteriores personas que han hecho el recorrido. Según ibamos adentrandonos, aparecían pinos, encinas y quejigos. También tuvimos la oportunidad de pasar junto a cabras y vacas que pastaban alegremente y de manera despreocupada de la presencia humana - se diría que estaban bastante socializadas -.

Durante el trayecto fuimos alcanzando a muchos excursionistas que realizaban el camino en el mismo sentido que nosotros. De hecho durante parte del mismo nos agregamos a un grupo bastante numeroso que parecía conocer el camino. El sendero, en bastante de sus tramos, se encontraba muy embarrado, ya que durante los días anteriores había estado lloviendo. Aún así estabamos convencidos de seguir hasta por lo menos llegar al paraje que da nombre al mismo.

Finalmente, y después de una caminata de casi dos horas, llegamos al punto estrella de la ruta, el famoso paraje del salto del cabrero, donde disfrutamos de unas magníficas vistas y paramos para comer algo. La ruta continúa hasta Benaocaz, en total unos 7.200 metros (según el plano informativo), aunque nosotros en este punto decidimos dar la vuelta para poder llegar a casa a la hora de almorzar. En total empleamos unas 4 horas aproximadamente, pero no se nos hizo largo para nada, sino todo lo contrario. De hecho no descartamos en breve realizar la ruta en su totalidad. En general, para mi ha sido una jornada muy bonita y gratificante, y además me ha venido muy bien como comienzo de los entrenos largos para la preparación de los 101 Km de Ronda.